En la lección de hoy vamos a estudiar el uso del SE en todas sus facetas.
Para los hablantes de otras lenguas, es casi un misterio la forma en la que usamos los pronombres de reflexivo. Sin embargo tiene todo el sentido para los hablantes latinos.

Lo primero que vamos a ver es la dirección de la acción del verbo. Para eso tenemos que definir tres conceptos básicos. Por un lado tenemos el sujeto, que es quien hace la acción. Por otro el verbo y su significado. Como último punto, el objeto, que es quien recibe la acción.

El Bueno va a disparar al Malo
Es muy común hacer comentarios durante las películas entre los españoles. Si alguna vez habéis ido al cine en España (para ver una película en español) seguro que sabéis de qué os hablo. La sabiduría popular ha bautizado a los personajes principales como el Bueno y el Malo, en alguna película también estaba el Feo…

En el ejemplo de arriba vemos muy claro cómo actúa el Sujeto (el Bueno) el verbo (disparar) y el Malo (quien va a recibir el disparo).
Este uso es el más común para los verbos, pero tenemos otro en el que el Sujeto y el Objeto son la misma persona. Sería algo así como si alguien se diera un tiro en el pie.


La persona que realiza la acción (sujeto) también es quien lo recibe (objeto) así que para eso usamos el reflexivo con sus pronombres.
Aquí podéis ver a Will Smith peinando a su perrito, es un uso normal. Pero cuando una persona se peina, significa que hace la acción a sí misma.
Existen muchas acciones que pueden ser reflexivas o no según la circunstancia

Ella se peina, y además se ve en el espejo al mismo tiempo. Son dos acciones reflexivas.
Cuando un verbo viene de forma reflexiva se le incluye el SE al final. Así por ejemplo el verbo VERSE a uno mismo.
Ese SE se convierte en el resto de pronombres, pero una vez conjugado cambia de posición.

Aquí podéis ver como en las rutinas diarias tenemos algunos verbos reflexivos, y vemos cómo tiene mucho sentido. El reflexivo normalmente afecta a nosotros, a partes de nuestro cuerpo o posesiones que llevamos puestas como la ropa.
Me lavo las manos
Ella se plancha los vestidos
Nos miramos en el espejo

En algunos casos el uso de un verbo en reflexivo puede cambiar un poco su significado. El verbo IR significa desplazarnos a algún lugar, pero IRSE significa dejar un lugar o a una persona.
Ella se fue para no volver
O como el verbo JUGAR, que cuando decimos JUGARSE es apostar algo de mucho valor como dinero o la propia vida.

Me jugué la vida porque me comí un chuletón enorme
En el ejemplo de arriba, que no podemos tomarlo de forma literal, sino como un chiste muy español, vemos como el uso del reflexivo también sirve para exagerar. El verbo COMER no es reflexivo, por motivos obvios, pero se usa de forma reflexiva para exagerar.
SE VENDE

¿Se vende la leña sola? ¿o las casas? Vemos este tipo de oraciones por todos sitios en España, y son otra forma del reflexivo, aunque realmente se llama Pasiva Refleja. Es una forma de no tener que decir quién vende algo, si no lo usáramos quedaría algo así:
Juanito vende leña de encina y olivo
Pero como Juanito no quiere decir su nombre, pues usa otro tipo de oración. La Pasiva Refleja está muy extendida con oraciones como las siguientes:

Aquí se habla Español
Se dice… Se comenta…
Se pintan casas
Se reparan coches
Se busca
Pero no podemos confundir el SE reflexivo con el Imperativo del verbo SABER, ya que este lleva tilde:
– Se buscan camareros en ese restaurante, ¿pero se necesita experiencia?
– No lo sé…
Y aquí tenéis una lista con verbos que cambian el significado según sean reflexivos o no, y estoy seguro que podéis escribir un texto usándolos y poner ejemplos de cuantos usos en reflexivos o pasiva refleja conocéis
