Uno de los retos más grandes de mi vida profesional es conseguir que mis alumnos hablen cueste lo que cueste…


Aunque leas la enciclopedia más completa del mundo sobre cómo montar en bicicleta, no aprenderás a montar en bici hasta que no te subas a una, porque a montar en bici se aprende montando en bici.
Con los idiomas pasa igual, a hablar se aprende hablando… y no leyendo o haciendo ejercicios de gramática exclusivamente. ¿Pero es posible que un alumno hable si no conoce nada de la lengua? Por supuesto, pero es necesario que el profesor cree el ambiente adecuado.
Lo más común es que los alumnos tengan miedo a caerse de la bicicleta, que en el caso de los idiomas no es más que equivocarse al hablar. Lo positivo es que equivocarse hablando duele menos que caerse de la bicicleta, aunque a muchos les duela mucho en el orgullo.

Me gusta seguir el método de aprendizaje de idiomas más efectivo del mundo, el de la naturaleza. Cuando nacemos no hablamos ningún idioma. Para hablar es necesario que un bebé escuche, imite, repita y se equivoque. Solo entonces se produce el aprendizaje. ¡Pero es necesario que seas valiente!
Aunque sea extraño, se puede aprender el significado de una palabra por su contexto, y no es tan necesario que la palabra sea traducida por un diccionario.
Con la gramática es aun más efectivo, por eso la mayoría de las personas del mundo son expertas en gramática, pero es inusual que alguien pueda explicar esas reglas que aplica a la perfección.
Con un poco de ayuda empezaremos a rodar en la bicicleta mucho mejor. Eso nos va a dar mayor confianza y nos hará sentirnos muy bien.
¡Pero ten cuidado, porque el exceso de confianza puede hacer que tengamos las caídas más grandes! Supongo que caerse en normal en el proceso, pero fíjate que cada vez vamos a mayor velocidad.

De vez en cuando nos vamos a encontrar obstáculos en el camino. Algunos puede que sean muy duros de superar, pero el secreto está en no abandonar nunca.
Cuando encuentres un obstáculo grande en tu camino, no pienses que es algo malo. En realidad es un reto que tienes que superar. Algún día, cuando todo haya pasado, lo recordarás con alegría.
El subjuntivo probablemente suponga uno de los obstáculos más grandes que os vais a encontrar en el camino. Como cualquier otra característica del idioma, se aprende con mucha repetición y perseverancia. Escucha a la gente, copia sus frases con subjuntivos y equivocate mucho hasta que lo domines.
Muchos alumnos piensan que si van a clase simplemente, llegará el día en el que se encienda una bombilla sobre sus cabezas y comiencen a hablar hasta por los codos… y siento ser yo quien te diga que eso no va a ocurrir nunca.

Para ser un buen hablante hay que empezar siendo un mal hablante. Si continuas a pesar de las adversidades, si no te rindes cueste lo que cueste y practicas con alegría todo lo nuevo, vas a terminar hablando con soltura y sin esfuerzo.

Nunca digas nunca jamás
Muchos estudiantes piensan que no lo van a conseguir y tienen razón. Si piensas que no vas a poder conseguir algo, está claro que no lo vas a conseguir.
Por eso es más productivo que pienses que sí lo vas a hacer. Que pronto puede que hables igual de bien que cualquier nativo español, y si sigues trabajando lo vas a conseguir.
Tardes lo que tardes, cueste lo que cueste… lo vas a conseguir